En el Instituto Pedagógico Esmeralda creemos que la educación debe ser integral; por lo tanto, nuestro principal propósito es el desarrollo pleno de la persona, formar seres humanos capaces de pensar por sí mismos, de alcanzar las metas que se propongan, de vivir comprometidos con su entorno, apoyándose del aprendizaje como una construcción permanente de saberes, habilidades y actitudes en un ambiente de práctica de valores que ayude a forjar el carácter de la persona y lo lleve a desarrollar un plan de vida que le dé las herramientas necesarias para vivir en un mundo en constante cambio.
Nosotros nos fijamos el reto de encontrar y desarrollar las cualidades de nuestros alumnos basándonos en la siguiente metodología:
Cultivamos en nuestros alumnos la conciencia de ser partícipes en la construcción de su conocimiento y les enseñamos a asumir con responsabilidad las consecuencias de sus actos; los programas académicos e institucionales los forman para que sean capaces de ejercer una acción transformadora en su comunidad, a través de un compromiso de liderazgo social.
Parte importante de este modelo es la evaluación, considerada como un proceso reflexivo y sistemático que debe estar presente en todo momento ya que representa una oportunidad más de aprendizaje para el alumno, retroalimentándolo sobre el progreso de su desempeño.
Dentro de nuestro modelo educativo, el maestro acepta al alumno como persona, actúa como un ejemplo para éste, mostrando así un compromiso con los principios y valores que rigen nuestra Institución, ya que consideramos que éstos no sólo contribuyen a la armonía de las relaciones entre los alumnos en el aula si no que también tiene un efecto en las familias que forman parte de nuestro Instituto ya que son parte de la formación de nuestros alumnos teniendo un compromiso compartido con los maestros en el proceso de enseñanza – aprendizaje que no se logra sin la práctica de los valores esenciales.